Sin empacho alguno, y anteponiendo intereses a la educación de más de 15 mil alumnos que cursan el bachillerato en el subsistema del Colegio de Bachilleres de Tlaxcala, el dirigente del Sindicato de Trabajadores Académicos, Héctor Fernando Lima Hernández aseguró que no dejarán que se reanuden labores hasta que no se haya cedido a las exigencias de la base laboral.

En rueda de prensa llevada a cabo el mediodía de este jueves, el dirigente gremial, acompañado de delegados de los 24 planteles educativos de la entidad insistieron en que debe haber una respuesta afirmativa a sus demandas para que se dé un cese al paro técnico que se mantiene desde temprana hora y que además detonar en el estallamiento a huelga el próximo 29 de marzo de manera permanente.

Entre las exigencias, los más de 900 docentes que se mantienen sin laborar  exigen la restitución de un pago que correspondería a la retención de impuestos sobre la renta del aguinaldo concerniente al año 2017, donde dijeron ese descuento no debió suceder, por lo que urgieron se les regrese dicha suma, misma que ascendería a alrededor de 4 millones de pesos en obligaciones tributarias.

Asimismo, acusaron ser objeto de hostigamiento laboral por parte de personal de la Dirección General en los planteles, además de varias demandas, todas ellas inherentes al pago de percepciones y bonos que dijeron haber sido ganados por el sindicato como parte de sus variadas prestaciones laborales.

Al ser cuestionado sobre la afectación que esto causa a los miles de jóvenes que conforman la plantilla estudiantil refirió que están conscientes de ello y se pronunció a favor de la educación de calidad, empero señaló que: "Ni modo, nos obligaron a esto y los alumnos tendrán que pagar los platos rotos". 

En ese sentido, dijo que la supuesta cerrazón por parte de la Dirección General para la atención de sus demandas fue lo que motivo a asumir este tipo de acciones.