8 M…

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Cada 8 de marzo, es un día que nos invita a la reflexión; ¿qué está pasando con el tema de la igualdad de género? Una igualdad que cada día se torna más compleja, pese a los avances que se han tenido en la materia de eso que sea denominado democracia genérica.

Una democracia genérica que fue diseñada desde la propia constitución, cuando se reformaron diez artículos el pasado 06 de junio de 2019, y donde se establece la paridad en todo, en los poderes públicos, en los organismos públicos autónomos, y en los tres niveles de gobierno.

Si la lógica no falla, este año México tendrá su primera mujer presidenta. En tanto la SCJN, el INE y la Cámara de Senadores, son presididas por una mujer. Hasta antes de la licencia de Sheinbaum, había un total de diez mujeres gobernando una entidad federativa; Aguascalientes, Baja California, Campeche, Colima, Quintana Roo, Chihuahua, Guerrero, Tlaxcala, Estado de México y la Ciudad de México.

Este fenómeno sea replicado en cada una de las entidades federativas, donde la paridad sea convertido en una realidad en varias instituciones públicas, sin embargo, este fenómeno parece ser solo un mero discurso. Porque en los hechos los feminicidios, la trata de personas sobre la mujer, la violencia, la brecha salarial desigual entre géneros, el maltrato a las niñas, el acoso sexual y hostigamiento laboral sobre este sector es una constante. Es un lastre social que pese al derecho constitucional por acceder a los cargos públicos donde se toman decisiones y donde la mujer ocupa puestos de relevancia, cada año las demandas siguen siendo las mismas.

Lo cual, nos invita a reflexionar que este pasando, si bien la sociedad patriarcal y el machismo como ideología dominante, son los principales precursores de este mal en la estructura social; hoy ante el avance de la mujer en los espacios públicos, debería ser una atenuante ante este fenómeno, sin embargo, parece que el tema de la sororidad entre la mujer encumbrada en el poder y la base social, son una gran disyuntiva.

Muchas mujeres que ocupan puestos relevantes en el poder público y político, deberían recordar que están ahí por la lucha de los colectivos, de las mujeres que no se callaron y que a pesar que algunas fueron silenciadas, han ido logrado reformas constitucionales y legales de gran calado para hacer realidad la igualdad.

Que, si están ahí, es por esta lucha, y que deberían ser solidarias, sin embargo, muchas y no generalizo no tienen idea de lo que es la igualdad de género, y piensan que solo usando su moño naranja cada mes, o estampando su huella en un muro, ante la comodidad que les da tener una oficina y una quincena segura, las hace insensibles ante sus propios congéneres.