¿Buscando al muñequito? Esta es la historia de la tradicional Rosca de Reyes

¿Buscando al muñequito? Esta es la historia de la tradicional Rosca de Reyes

Además de su delicioso sabor, la rosca de reyes está llena de historia y tradición, en Tlaxcala como en diversos puntos del país, panaderías ya alistan la preparación de la rosca con ingredientes tradicionales y sus variantes de sabor.

Cuarto de Guerra te preparó las cinco cosas que debes conocer de este tradicional pan, por demás ¡Delicioso!

1- ¿Dónde nació?

Data del siglo IV cuando el cristianismo afianzó su lugar en el imperio Romano, se estilaba entonces ocultar un haba al interior del pan y se partía el día que los Romanos de Occidente celebraban la Epifanía (el encuentro de los Reyes Magos con el niño Jesús).

Para Francia la tradición apareció en el siglo XIV sustituyendo el haba por un muñequito de porcelana.

2- Ovaladita ¿Por?

La forma ovalada de la rosca tiene muchos significados, entre ellos que evoca a la corona de los magos de oriente, también simboliza el amor a Dios y hacia Dios.

3- Frutita Seca

Los pedazos de fruta seca, dátiles, higos, representan las joyas de las coronas de los Reyes Magos.

4- El Muñeco

Simboliza la odisea que la familia de Jesús pasó para ocultarse del Rey de Herodes en el desierto.

Si te sale al cortar un pedacito ya sabes ¡Te tocan los tamales!

5- Fusión de tradiciones

Te has preguntado por qué hay que hacer los tamales i te sale muñequito en la rosca? Ésta costumbre se deriva de una fusión entre las tradiciones del México Prehispánicoy las traídas del Viejo Mundo: más o menos ajustado al Calendario Gregoriano, hacia principios del mes de febrero los antiguos mexicanos celebraban a Tláloc, deidad portadora de la lluvia, fecha en que además daba inicio la temporada agrícola (de hecho, en algunas comunidades indígenas todavía se llega con semillas a los templos para bendecirlas durante la fiesta de la Candelaria). Dado que el maíz era (y es) inmensamente sagrado para la cultura mexica, todo alimento preparado a base de él representaba la más alta de las ofrendas y, entre ellas, por supuesto no podían faltar los tamales.

A la llegada de los españoles, se hizo coincidir esta celebración con la de la presentación de Jesús en el templo de Jerusalén y más adelante, durante el virreinato, se popularizó la costumbre de que, al partir la rosca, a quien le tocara uno de los muñecos automáticamente se convertía en padrino del niño Jesús, y se veía obligado a organizar la tamaliza, que nunca dejó de hacerse desde antes de la conquista, pero en diferente contexto.