Amarga despedida
Una emotiva despedida tuvo la diputada federal Mariana Jiménez Zamora, de la fracción parlamentaria del PAN en el Congreso de la Unión.
La legisladora tlaxcalteca no se quería ir a la bancada de Movimiento Ciudadano, pero fue obligada por el excoordinador panista en Tlaxcala.
Así lo relató Maru Rojas, quien lleva muchos años cubriendo la fuente de la Cámara de Diputados Federal para el grupo Radio Fórmula.
La experimentada periodista no da el nombre, pero alude al exalcalde panista de Apizaco, Julio César Hernández Mejía, como el responsable del cambio de camiseta.
Maru Rojas dice que su ex coordinador de partido en Tlaxcala se fue a MC y la obligó (a Mariana) a irse a ese partido aún en contra de su voluntad, porque “yo te hice diputada”.
Incluso, reveló que la presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Kenia López Rabadán como la bancada naranja, están protegiendo mucho a la diputada de Tlaxcala.
A Mariana Jiménez Zamora la cuidan porque la ven como una diputada federal muy inocente, políticamente hablando, joven y demasiado trabajadora.
Tan no se quería ir de la bancada del PAN, que no salió por la puerta de atrás, como las chachas, sino que tocó la puerta de cada diputado azul para despedirse.
De manera educada, pero con notable tristeza, les dijo a sus ahora ex compañeros de partido que no se quería ir, pero que la obligaron.
El conductor Juan Pablo Becerra Acosta, quien primero cuestionó el chapulineo de la legisladora tlaxcalteca, aseveró que estamos ante un caso de trata política de personas.
En la tierra que tiene arraigado ese estigma de la trata de personas, no abona nada el obligar a alguien a cambiar de camiseta con fines políticos.
Como tampoco le suma nada al partido Movimiento Ciudadano llevarse a figuras de otras fuerzas partidistas por esa vía.
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