Con bombo y platillo Morena anunció la visita de Andrés Manuel López Obrador el próximo 5 de junio, quien presidirá mítines en Zacatelco y Apizaco.

La presencia de AMLO en Tlaxcala reviste especial interés, pues tendrá que demostrar mayor poder de convocatoria que sus contrincantes.

El candidato de la coalición “Por México al Frente”, Ricardo Anaya, reunió a más de cinco mil partidarios en el Centro de Convenciones.

Mientras que la  visita de José Antonio Meade a Tlaxcala puso sobre la mesa la fortaleza del priísmo y el compromiso de sus aliados.

Ya se vio que el PRI-PVEM-PANAL están decididos a llegar hasta el final, para asegurar el triunfo de la coalición “Todos por México” el 1 de julio.

La fuerza de  Meade  quedó expuesta en  el evento masivo en el que se dieron cita con alrededor de 15 mil militantes y simpatizantes.

De ahí que será interesante conocer la fuerza del Peje, en un momento en que la campaña de Meade está creciendo en el estado.

Mientras que la figura de Andrés Manuel López Obrador sufre las consecuencias de su populismo y anacrónico pensamiento.

Ahí está el caso de la candidatura al Senado de Nestora Salgado, acusada de secuestro, cuyo escándalo ya empieza a preocupar a su equipo de campaña.

Incluso Nestora Salgado tuvo que suspender su visita a Tlaxcala, al aparecer mantas de rechazo en diferentes puntos de la entidad.

Esas mismas muestras de repudio se están dando en todo el país, a pesar que Morena se empeña en mantenerla como candidata.

Pero regresando al poder de convocaría de los candidatos presidenciales, el evento multitudinario de Meade llamó la atención nacional.

Nos enteramos que el equipo de campaña del candidato, se mostró sorprendido por la respuesta que tuvo en Tlaxcala.

Ya que aseguran que en lo que llevan de campaña, no habían tenido un evento de esa magnitud y con ese ánimo.

Tocará el turno de ver ahora, de qué está hecho el puntero en las encuestas, durante su visita a Tlaxcala, el próximo cinco de junio.

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