Los políticos también lloran

Los políticos también lloran

Parece que convertirse en candidato de algún partido político se volvió una profesión de alto riesgo en México, como ser policía, militar o periodista que se “atreve” a criticar al presidente Andrés Manuel López Obrador.

Además, con demasiada frecuencia, el proceso electoral concurrente 2023-24 deja claro que los políticos y sus familias también lloran en Puebla y el país, como se demostró el martes 9 de este mes, cuando una balacera en Tehuitzingo, Sierra Mixteca, provocó la muerte del esposo de una candidata de la coalición formada por PAN-PRI-PRD-PSI y dejó dos heridos:   https://desdepuebla.com/2024/04/09/matan-en-tehuitzingo-al-esposo-de-candidata-de-la-coalicion-pan-pri-prd-psi/.

Apenas van 10 días de campaña y, entre gente relacionada de alguna forma con la disputa por el poder, el saldo en la entidad es de dos homicidios (Acatzingo, Tehuitzingo) y un lesionado (Ajalpan). Pero el flagelo de que se junten la política y violencia - a través de asesinar o atacar a candidatos, funcionarios y/o sus parientes- no solamente sacude a Puebla, sino a la mayor parte del país: https://desdepuebla.com/2024/04/02/en-pleno-acto-de-campana-asesinan-a-candidata-de-morena-a-la-alcaldia-de-celaya-guanajuato/

Y si la contienda presidencial 2017-18 resultó cruenta, todo apunta a que la del 2023-24 será peor, mucho peor, a menos que los órganos electorales federal, estatal, todos los niveles de gobierno y los propios partidos y candidatos hagan algo –JUNTOS- para impedirlo:  https://desdepuebla.com/2023/07/14/levantan-y-asesinan-a-javier-torres-barrera-ex-candidato-a-la-presidencia-de-chiautla-de-tapia/

ASESINAR POLÍTICOS Y/O CANDIDATOS, UNA PRÁCTICA CADA VEZ MÁS FRECUENTE   

Mi compañera Maricela Allende Marcito realizó un recuento de las elecciones concurrentes del 2017 y 18, que dejaron un saldo de casi una cincuentena de políticos asesinados en México:

“De acuerdo con el conteo de Etellekt, entre el 8 de septiembre de 2017 -inicio del proceso electoral federal- y el 27 de junio de 2018 -fin de las campañas electorales-, fueron 48 los políticos asesinados; 20 eran candidatos ya con registro oficial y 28 precandidatos: https://desdepuebla.com/2019/06/10/los-politicos-tambien-lloranal-menos-una-veintena-de-alcaldes-y-o-altos-funcionarios-han-sido-asesinados-en-puebla-del-2011-a-la-fecha/

“De los 48 políticos asesinados, 26 aspiraban a una presidencia municipal, ocho a una regiduría, diez a una diputación local y dos más a una diputación federal. Del total de candidatos asesinados (en los comicios del 2017-18), 41 eran hombres y siete mujeres.

“Sobre la afiliación política de las víctimas, 12 pertenecían al PRI, 11 al PRD, seis a Morena y cinco al PAN. La entidad federativa que registró más asesinatos políticos, según la información recabada, fue Guerrero, con 12; le siguen Michoacán, Oaxaca y Puebla con cinco asesinatos cada uno y el Estado de México y Jalisco con cuatro homicidios”, detalló el trabajo periodístico de Maricela Allende.

VIOLENCIA, POSTAL RECURRENTE DE LAS ELECCIONES EN 2021 Y 2024

Pero, si el proceso electoral de hace 6 años fue violento, el de 2024 tiende a ser peor, como lo demuestra el violentómetro elaborado por El Financiero de noviembre del 2023 al 6 de marzo pasado, cuando se llevaba un conteo de al menos 23 homicidios de alcaldes, candidatos, regidores y políticos inactivos, pese a que hasta ese día ¡todavía ni siquiera comenzaba la campaña!: https://desdepuebla.com/2024/03/24/jaime-gonzalez-y-acatzingo-ejecucion-en-el-corazon-del-grupo-en-el-poder/

Del 6 de marzo a la fecha, los ataques a candidatos, políticos y/o sus familiares no solamente no cesaron, sino que han ocurrido, quizás, con mayor frecuencia, inclusive en Puebla, donde apenas el domingo pasado balearon al esposo de una candidata a diputada federal de la alianza PAN-PRI-PRD-PSI y, como ya se mencionó, el martes asesinaron al marido de una aspirante a regidora en Tehuitzingo por las mismas siglas: https://desdepuebla.com/2024/03/24/jaime-gonzalez-y-acatzingo-ejecucion-en-el-corazon-del-grupo-en-el-poder/

Lamentablemente, la sangre y violencia no solamente invadieron México en los comicios presidenciales de 2018 y 24, sino también en el proceso intermedio del 2021, cuando la propia secretaría de Seguridad Ciudadana federal, Rose Icela Rodríguez, reconoció que, ante las amenazas, ¡234 candidatos recibían protección!: https://desdepuebla.com/2021/05/30/elecciones-2021-ante-la-ola-de-violencia-a-quien-demonios-le-importa-el-resultado/.

En aquel 2021, los casos del candidato morenista baleado en Ocoyucan y el aspirante del PAN a punto de ser linchado en San Matías Tlalancaleca, supuestamente por comprar votos, se convirtieron en pruebas claras de que cada vez resulta más peligroso contender por un cargo de elección popular: https://desdepuebla.com/2021/05/28/balean-a-candidato-de-morena-en-santa-clara-ocoyucan/.

Los políticos también lloran

Parece que convertirse en candidato de algún partido político se volvió una profesión de alto riesgo en México, como ser policía, militar o periodista que se “atreve” a criticar al presidente Andrés Manuel López Obrador.

Además, con demasiada frecuencia, el proceso electoral concurrente 2023-24 deja claro que los políticos y sus familias también lloran en Puebla y el país, como se demostró el martes 9 de este mes, cuando una balacera en Tehuitzingo, Sierra Mixteca, provocó la muerte del esposo de una candidata de la coalición formada por PAN-PRI-PRD-PSI y dejó dos heridos:   https://desdepuebla.com/2024/04/09/matan-en-tehuitzingo-al-esposo-de-candidata-de-la-coalicion-pan-pri-prd-psi/.

Apenas van 10 días de campaña y, entre gente relacionada de alguna forma con la disputa por el poder, el saldo en la entidad es de dos homicidios (Acatzingo, Tehuitzingo) y un lesionado (Ajalpan). Pero el flagelo de que se junten la política y violencia - a través de asesinar o atacar a candidatos, funcionarios y/o sus parientes- no solamente sacude a Puebla, sino a la mayor parte del país: https://desdepuebla.com/2024/04/02/en-pleno-acto-de-campana-asesinan-a-candidata-de-morena-a-la-alcaldia-de-celaya-guanajuato/

Y si la contienda presidencial 2017-18 resultó cruenta, todo apunta a que la del 2023-24 será peor, mucho peor, a menos que los órganos electorales federal, estatal, todos los niveles de gobierno y los propios partidos y candidatos hagan algo –JUNTOS- para impedirlo:  https://desdepuebla.com/2023/07/14/levantan-y-asesinan-a-javier-torres-barrera-ex-candidato-a-la-presidencia-de-chiautla-de-tapia/

ASESINAR POLÍTICOS Y/O CANDIDATOS, UNA PRÁCTICA CADA VEZ MÁS FRECUENTE   

Mi compañera Maricela Allende Marcito realizó un recuento de las elecciones concurrentes del 2017 y 18, que dejaron un saldo de casi una cincuentena de políticos asesinados en México:

“De acuerdo con el conteo de Etellekt, entre el 8 de septiembre de 2017 -inicio del proceso electoral federal- y el 27 de junio de 2018 -fin de las campañas electorales-, fueron 48 los políticos asesinados; 20 eran candidatos ya con registro oficial y 28 precandidatos: https://desdepuebla.com/2019/06/10/los-politicos-tambien-lloranal-menos-una-veintena-de-alcaldes-y-o-altos-funcionarios-han-sido-asesinados-en-puebla-del-2011-a-la-fecha/

“De los 48 políticos asesinados, 26 aspiraban a una presidencia municipal, ocho a una regiduría, diez a una diputación local y dos más a una diputación federal. Del total de candidatos asesinados (en los comicios del 2017-18), 41 eran hombres y siete mujeres.

“Sobre la afiliación política de las víctimas, 12 pertenecían al PRI, 11 al PRD, seis a Morena y cinco al PAN. La entidad federativa que registró más asesinatos políticos, según la información recabada, fue Guerrero, con 12; le siguen Michoacán, Oaxaca y Puebla con cinco asesinatos cada uno y el Estado de México y Jalisco con cuatro homicidios”, detalló el trabajo periodístico de Maricela Allende.

VIOLENCIA, POSTAL RECURRENTE DE LAS ELECCIONES EN 2021 Y 2024

Pero, si el proceso electoral de hace 6 años fue violento, el de 2024 tiende a ser peor, como lo demuestra el violentómetro elaborado por El Financiero de noviembre del 2023 al 6 de marzo pasado, cuando se llevaba un conteo de al menos 23 homicidios de alcaldes, candidatos, regidores y políticos inactivos, pese a que hasta ese día ¡todavía ni siquiera comenzaba la campaña!: https://desdepuebla.com/2024/03/24/jaime-gonzalez-y-acatzingo-ejecucion-en-el-corazon-del-grupo-en-el-poder/

Del 6 de marzo a la fecha, los ataques a candidatos, políticos y/o sus familiares no solamente no cesaron, sino que han ocurrido, quizás, con mayor frecuencia, inclusive en Puebla, donde apenas el domingo pasado balearon al esposo de una candidata a diputada federal de la alianza PAN-PRI-PRD-PSI y, como ya se mencionó, el martes asesinaron al marido de una aspirante a regidora en Tehuitzingo por las mismas siglas: https://desdepuebla.com/2024/03/24/jaime-gonzalez-y-acatzingo-ejecucion-en-el-corazon-del-grupo-en-el-poder/

Lamentablemente, la sangre y violencia no solamente invadieron México en los comicios presidenciales de 2018 y 24, sino también en el proceso intermedio del 2021, cuando la propia secretaría de Seguridad Ciudadana federal, Rose Icela Rodríguez, reconoció que, ante las amenazas, ¡234 candidatos recibían protección!: https://desdepuebla.com/2021/05/30/elecciones-2021-ante-la-ola-de-violencia-a-quien-demonios-le-importa-el-resultado/.

En aquel 2021, los casos del candidato morenista baleado en Ocoyucan y el aspirante del PAN a punto de ser linchado en San Matías Tlalancaleca, supuestamente por comprar votos, se convirtieron en pruebas claras de que cada vez resulta más peligroso contender por un cargo de elección popular: https://desdepuebla.com/2021/05/28/balean-a-candidato-de-morena-en-santa-clara-ocoyucan/.