Demetrio Rivas Corona, el charro del SNTE

Demetrio Rivas Corona, el charro del SNTE


A mediados de julio del 2015, cuando el ex secretario general nacional del SNTE, Juan Díaz de la Torre, impuso a Demetrio Rivas Corona en la sección 31 del mismo sindicato en Tlaxcala, el país era mal gobernado por Enrique Peña Nieto, que apenas estaba a la mitad de su gestión, mientras otro priísta era el titular del ejecutivo en ese estado, Mariano González Zarur. 

Muchas cosas cambiaron en el país después de esa fecha: Juan Díaz de la Torre dejó la dirigencia del SNTE federal en noviembre del 201, acusado por el grupo de la ex lideresa, Elba Esther Gordillo, de mal uso de fondos del retiro de los maestros:  https://www.elsoldemexico.com.mx/mexico/politica/elbistas-demandan-a-diaz-de-la-torre-por-mal-uso-de-fondos-de-retiro-2187761.html 

El PRI, Enrique Peña Nieto y Mariano González Zarur –afortunadamente- ya no gobiernan México ni Tlaxcala, así que Demetrio Rivas Corona es un emisario del pasado en toda la extensión de la palabra, no solamente porque quienes lo impusieron ya ni en política están, sino, también, por el hecho de que el todavía secretario general de la sección 31 SNTE Tlaxcala representa el más rancio charrismo sindical, que –al menos en teoría- debería quedar erradicado.     

El 13 de julio del 2015, cuando Demetrio Rivas Corona asumió la secretaría general de la sección 31 del SNTE-Tlaxcala, se comprometió a “trabajar con  gran responsabilidad, con mucha emoción, pero sobre todo, ser muy puntual que los compañeros trabajadores de la educación esperan un buen trabajo del nuevo Comité Ejecutivo Seccional que ahora presido”, expuso, tras comentar que en el tema de la evaluación educativa no se oponen a este ejercicio, pero adelantó que se revisará el procedimiento y formato con la autoridad educativa” (Jornada de Oriente). 

NADA DE TRANSPARENCIA NI RENDICIÓN DE CUENTAS 

Pero basta con platicar con cualquier docente tlaxcalteca para comprobar que no cumplió prácticamente nada de lo ofrecido, como lo demuestra el hecho de que lleva 2 años sin rendir ninguna cuenta de lo que él y su gente han hecho con las cuotas mensuales de los más de 14 mil maestros afiliados a la sección. 

Incluso, la página oficial del SNTE 31 no informa nada, en absoluto, de a cuánto ascienden las aportaciones mensuales de los docentes y qué hacen sus “representantes” con ese dinero, que es mucho. Basta con saber que el auditorio de la sección costó 12 millones de pesos:  https://snte.org.mx/seccion31/notas/

Pero la transparencia y rendición de cuentas no fueron la constante en la gestión sexenal de Demetrio Rivas Corona, tampoco la defensa de los agremiados, como –en su momento- lo señalaron diversos sectores, que lo acusaron de plegarse a la “reforma educativa” de Peña Nieto y que de manera permanente fueron abandonados por el sindicato cuando protestaron contra algún directivo o medida arbitraria de la Uset:  https://www.lajornadadeoriente.com.mx/tlaxcala/exigen-docentes-destitucion-del-supervisor-de-la-zona-08-de-secundarias-tecnicas/