No es casual que el norte y occidente del país - sacudidos por la delincuencia organizada, el narcotráfico y, también, la cruel indiferencia del gobierno federal ante la inmisericorde y creciente cantidad de asesinatos dolosos- sea las regiones del país con el mayor problema de desaparición de personas, según la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas (CNB) de la secretaría de Gobernación. 

Con datos actualizados al 2 de mayo, la CNB reconoce en Jalisco al estado con la cifra más alta de gente desvanecida (14 mil 945), un número muy elevado, incluso, si se tiene en cuenta su población de 8 millones 348 mil 151 habitantes en 2020, según el Inegi. Le sigue Tamaulipas, con 11 mil 947 personas desaparecidas, una cantidad bestial para los 3 millones 527 mil 735 de habitantes. 

La tercera entidad con el número neto más elevado de gente perdida es EdoMéx (10 mil 935), aunque si se analiza que tiene la población más numerosa del país (16 millones 992 mil 418, según el Inegi en 2020) resulta lógico que aparezca en los primeros lugares de este indicador. Otro estado norteño, Nuevo León, registra 6 mil 216 desvanecidos, que representan una cantidad importante por su número total de habitantes: 5 millones 784 mil 442. 

Lugares con un número bajo o relativamente menor de gente, pero sacudidos por la violencia e inseguridad, como Zacatecas y Colima, también son de los peores del país por la desaparición de gente: En Zacatecas se tiene un registro de 2 mil 842 no localizados, pese a que su cifra de habitantes es de un millón 622 mil 138. 

VERACRUZ, SINALOA, SONORA, MICHOACÁN Y GUERRERO, EN LA LISTA NEGRA  

Colima cuenta con una población de 731 mil 391 personas, pero su cifra de no localizados es de mil 444, números que la corroboran como una entidad hermosa y pequeña, pero con graves problemas de violencia, inseguridad y delincuencia organizada: https://desdepuebla.com/2022/04/02/aumenta-el-porcentaje-de-homicidios-dolosos-en-puebla-y-tlaxcala/ 

También Veracruz (5 mil 628), Sinaloa (5 mil 449), Sonora (4287), Michoacán (4305) y Guerrero (3780) se encuentran en la lista de estados con un severo problema de gente no localizada, aunque el primero de ellos supera los 8 millones 60 mil habitantes, un hecho que de alguna manera explica el por qué se encuentra entre los de mayor cantidad de desaparecidos. 

Una situación similar presenta la Ciudad de México y su población de 9 millones 209 mil 994 personas, con un registro de 4 mil 16 no localizados. En contraste, otra entidad norteña, Chihuahua, presenta 3472 desaparecidos, un número bastante considerable si se añade que su población total es de 3 millones 741 mil 869 seres, de acuerdo a los números más recientes del Inegi. 

Finalmente, un estado con cantidades similares a las de Puebla tanto en gente no localizada como en población es Guanajuato, donde se reportan como perdidas 2 mil 681 personas entre un total de 6 millones 166 mil 934 habitantes. No obstante, desde hace tiempo dicha entidad es una de las peores del país en el rubro de homicidios dolosos por cada 100 mil habitantes:  https://desdepuebla.com/2022/02/26/mexico-obtuvo-el-tercer-puesto-en-muertes-a-finalizar-el-ano-2021-de-189-paises/. 

PUEBLA Y TLAXCALA, PROBLEMA REAL Y CRECIENTE 

Aunque si se toma en cuenta su cantidad de habitantes (6 millones 583 mil 278 en 2020, según el INEGI) las dos mil 623 personas desaparecidas en el estado de Puebla y reconocidas de manera oficial por el gobierno federal hasta el 2 de mayo, según la Comisión Nacional de Búsqueda de la secretaría de Gobernación, tal vez no parezca un número alarmante, lo cierto es que sí se trata de un problema real y creciente. 

De acuerdo a datos de la Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE), en 2015 había en el estado 122 personas no localizadas, pero un año después la cifra ascendió a 545, para 2017 se duplicó a mil 126 y en 2018 se generó el segundo peor registro de la entidad en este rubro, cuando quedó en mil 484.  

En 2019 se desvanecieron mil 518 y, a partir de ese momento, el número fue a la baja, con mil 382 personas desaparecidas en 2020 y mil 317 un año después. Ya en 2022, según la misma FGE, se confirmó el registro de 347 individuos reportados como perdidos: 118 en enero, 115 en febrero y 114 en marzo. 

Así que las cifras de la CNB marcan claramente que a partir de 2017 explotó en Puebla el problema social de la desaparición de gente y/o los familiares comenzaron a reportar con mayor frecuencia las ausencias de sus allegados. En el caso de Tlaxcala, su número formal de pérdidas es de 97, que tampoco parece ser una cifra importante, si se toma en cuenta su población ya de un millón 342 mil 977 habitantes, según el INEGI en 2020). 

No obstante, al momento de escribir estas líneas, la secretaría de Gobernación federal tiene el registro de 86 desaparecidos a los que se encontró en Tlaxcala, pero sin vida, lo que confirma que en dicha entidad –conocida a nivel internacional por la trata de gente y el secuestro de menores en Tenancingo y otros municipios- también existe una situación creciente de seres humanos que se desvanecen y a los que sus familiares no vuelven a ver.