Ley Bananera

Ley Bananera

¡No bueno! A nuestras autoridades en Tlaxcala nada más les faltó organizar un coffe break para los transportistas.

Lo decimos a cuento del papelazo que hizo la alcaldía capitalina, al cerrar vialidades de la ciudad para recibir con bombo y platillo la manifestación de transportistas contra la Ley de Movilidad en Tlaxcala.

Y es que, si fueran normalistas los habrían echado, pero para Bernardo López Nieto, Indalecio Saucedo y Hugo Salado existen todas las facilidades para poder manifestarse en contra de una Ley de Movilidad que ni siquiera han leído.

Lo que verdaderamente uno si no esperaba, fue la patética reacción del legislativo (quien propone la ley) para con los transportistas.

Así, simple y llanamente, sin discusión ni foros, sin mesas de trabajo ni análisis previos, sin estudios legislativos, carentes de cualquier fundamento institucional o legal, desconociendo por completo sus facultades, con las piernitas temblorosas y sus pelmazos rostros dijeron ‘stop’ a una ley necesaria para Tlaxcala.

No decimos necesaria para la operación de plataformas digitales como Pronto, sino más bien necesarias para poder regular el cabaret en el que pseudo líderes de transportistas han convertido al servicio colectivo en la entidad.

La Ley de Movilidad para el Estado de Tlaxcala es importante, urgente y necesaria no por un chambón diputado que no analizó su contenido y costo político antes de su presentación, sino porque contempla modificar 213 artículos que datan de 1983. ¡Por Dios!

Rayados en el ridículo vimos este jueves a diputados decir que ‘Acuerdan con transportistas echar abajo la ley de movilidad’, señores ¿Quiénes legislan?, ¿Para qué su salario?, ¿Miedo a qué?, las concesiones de esos líderes son del estado no sus títulos de propiedad.

Concesionarios y operadores, colectivos y taxistas dejen ya de engañarse, los ‘líderes’ que los representan son tiranos acostumbrados a negociar sus propios intereses no el bienestar colectivo.

‘Defensa de Transportistas’ ¡sí claro! Por eso los negocian por su apoyo en cada proceso electoral, por eso amagan por dinero cuando ustedes piden un incremento al pasaje, por eso nadie les garantiza llegar seguros a casa tras un asalto, por eso llevan décadas trabajando sin seguros médicos ni garantías.

¿De cuantas concesiones se han hecho de 20 años a la fecha?, ¿Qué de todo eso les ha tocado?

Gracias a la brillante ‘asesoría’ de sus lidercillos, serán ustedes, los más de dos mil transportistas que ayer se fueron a quejar quienes capitalicen todo el malestar ciudadano por su famosa ley. ¡Ya piensen!

Una bien pensada Ley de Movilidad sería el paso de Tlaxcala a mejorar sus vías de comunicación, eficientar los servicios de transporte colectivo y mejorar la calidad de vida de los usuarios, sería la llave a la eliminación de monopolios, la regulación de competencia y la clave para acabar con un fuerte eslabón de corrupción.

No se lo piensen mucho diputados, qué triste pasar a la historia como la parodia perfecta de legisladores que aprueban leyes bananeras, presentan iniciativas chambonas y ponen en alto, bien en alto a la cuarta transformación.

¿Qué necesitas mi transportista, te pasamos un café?

A colación:

Si nuestra policía ya era el último eslabón de la cadena que protegería al país, agárrese ciudadano, López Obrador, sus ecónomos y brillantes asesores calcularon con las rodillas las participaciones de Tlaxcala en el programa federal de Fortalecimiento a la Seguridad (FORTASEG) de una bolsa de más de cinco mil millones de pesos a la entidad le tocaron cero, cero pesos, cero centavos.

Menos mal que somos un estado seguro, ya lo dice el Gobernador.

Hasta la próxima…

@Naye_Romero89

nayelir31@gmail.com