Diputados que se autoengañan

Diputados que se autoengañan
Los diputados locales no entienden.
Abren frentes innecesarios, y un ejemplo son los fondos de apoyo al campo y de obras en los municipios que, en conjunto, supera los 400 millones de pesos. 
La diputada Michaelle Brito quiere echarse a la bolsa a los campesinos, porque ya está pensado en las elecciones venideras. 
Se inventó una supuesta confrontación con el Ejecutivo, al que le critica y exige la emisión de las reglas de operación de tales fondos.
Lo que no dice es que el problema surgió cuando manipularon la integración del presupuesto de 2019 para influir en la asignación de dichos recursos. Por eso les urge que sean liberados, porque hicieron compromisos. 
En el caso del fondo del campo, los diputados le hacen el caldo gordo a las organizaciones campesinas, a quienes no les dicen de frente que ya no pueden fungir como intermediarias de los apoyos.
Y en el caso del fondo de obras, muchas de ellas ocultan corrupción, porque ya existen, advierten sobrecostos, o de plano carecen de viabilidad.
Se engañan ellos mismos cuando quieren exculparse de los efectos de un decreto presupuestal mal hecho. 
 
DESTRUYENDO SU FUTURO.
La capacitadora del programa Jóvenes Construyendo el Futuro, Irene Payán, informó que, en el Congreso local, hay más de 130 jóvenes de este programa, a petición directa de ellos.
Argumentó que los chavos quieren estar en el recinto legislativo para aprender. Sin embargo, llama la atención esta cifra, y la supuesta disposición de los jóvenes para estar al servicio de los legisladores locales.
Aunque en un momento se dijo que media centena de jóvenes se incorporarían al Congreso, que cada diputado tendría a su cargo dos jóvenes, ahora esta cifra se va a más del doble, es decir, a más de cinco por legislador, lo que no se justifica. 
Los diputados deberían recapacitar respecto a qué tanto bien hacen a los jóvenes que necesitan espacios para aprender, cuando ellos no son ejemplo de excelencia ni de probidad. ¿Qué pueden aprender de ellos? ¿Plagio de iniciativas? ¿Señalamientos sin fundamento? ¿Desatención de temas prioritarios? ¿Rezago legislativo?
 
MAPACHES AL ACECHO.
Interesante la investigación de El Sol de México, que reveló que militantes de Morena manejan puestos clave de los Servidores de la Nación, lo que abre la puerta a la operación político-electoral desde el gobierno de la Cuarta Transformación. 
Los Servidores de la Nación son el grupo encargado de levantar el Censo del Bienestar que concentrará los datos de los millones de beneficiarios de los programas sociales del gobierno federal.
Sin embargo, al revisar la información del Portal Nómina Transparente y del Instituto Nacional Electoral (INE), el diario detectó que, de los coordinadores regionales, al menos en 25 casos fueron candidatos, legisladores o militantes de Morena.
En respuesta, los superdelegados del gobierno federal negaron que los Servidores de la Nación sean mapaches electorales, entre ellos, Lorena Cuéllar, quien justificó que los subdelegados regionales fueron nombrados por oficinas centrales del gobierno de López Obrador, lo que significa que se lavó las manos del asunto.
La realidad es que, por donde se vea, se trata de una operadora política, y solo falta verificar que se manifieste en términos electorales.