(Alexis P. González) Una  noche de disparos y zozobra se vivió este jueves en Panotla, cuando un capitán activo de la Guardia Nacional, aparentemente en estado de ebriedad y en su día libre, abrió fuego en al menos cinco ocasiones contra la casa de unos vecinos, provocando una movilización de fuerzas de seguridad de los tres niveles de gobierno.

El agresor, identificado como Agustín N., conocido como "El Camarón", finalmente fue asegurado por sus propios compañeros en la madrugada de hoy.

El drama se desató en la calle El Canal del Quinto Barrio. Según los primeros reportes de los vecinos, el conflicto arrastraba rencillas previas. La tarde del jueves, el capitán y su esposa habrían sostenido una discusión con otra familia. Sin embargo, la situación se salió de control al caer la noche, cuando el elemento, visiblemente alcoholizado según testigos, sacó su arma de cargo.

En un acto de extrema imprudencia, "El Camarón" disparó directamente hacia la vivienda de sus vecinos, donde se encontraban varios adultos y menores de edad. 

Un video que circula muestra al hombre en short y sandalias, con el arma en la mano, justo antes de las detonaciones. Los proyectiles, calibre 9 mm, dejaron casquillos percutidos con las iniciales de la Guardia Nacional, confirmando el uso de su armamento oficial.

Tras los disparos, los residentes buscaron refugio y alertaron a las autoridades, desatando un fuerte operativo. Elementos de la Policía Municipal de Panotla, la Secretaría de Seguridad Ciudadana, la propia Guardia Nacional y el Ejército Mexicano convergieron en el lugar, sitiando el domicilio del capitán, cerca de la Normal Rural.

A pesar de la presencia de un mando superior de la Guardia Nacional en Tlaxcala, el capitán Agustín N., se negaba a entregarse, refugiándose en su hogar, el cual supuestamente renta. Las autoridades se veían limitadas por la necesidad de una orden judicial para ingresar a propiedad privada, aunque mantuvieron comunicación constante para intentar persuadirlo.

Finalmente, en las primeras horas de esta madrugada, la tensa espera llegó a su fin: El elemento fue asegurado por sus compañeros de la Guardia Nacional. 

Se espera que este acto no quede impune y que se apliquen las sanciones correspondientes, tanto conforme a las leyes castrenses como a la legislación penal, dado el grave riesgo que supuso para la vida de civiles.

Los afectados han manifestado su intención de interponer la denuncia correspondiente. Según ellos, no es la primera vez que este tipo de incidentes ocurre con el capitán Agustín N., lo que agrava la situación.

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