Desarrollo con Bienestar y Humanismo: Pilar del Segundo Piso de la Cuarta Transformación
Pensar, decir y hacer: responsabilidad de la 4T
La Cuarta Transformación
rescató el sentido más profundo de la política: poner al pueblo en el centro de
la vida pública. Hoy, bajo la guía firme de la Dra. Claudia Sheinbaum Pardo,
Presidenta de México, y con el compromiso de la Lic. Lorena Cuéllar Cisneros,
Gobernadora de Tlaxcala, el Segundo Piso de la Cuarta Transformación avanza con
el bienestar y el humanismo como ejes rectores.
El Plan Nacional de
Desarrollo 2025-2030 lo deja claro: el desarrollo debe ser compartido, debe
reducir desigualdades y garantizar derechos. No hay justicia social sin salud
gratuita, sin educación accesible, sin pensiones dignas y menos sin
oportunidades reales para todas y todos.
La Dra. Claudia Sheinbaum
Pardo, Presidenta de México, impulsa un modelo de bienestar que privilegia a
quienes históricamente fueron olvidados. Programas sociales, IMSS-Bienestar,
becas universales y salarios mínimos fortalecidos son pruebas concretas de que
el humanismo mexicano es hoy una realidad.
Desde Tlaxcala, la Lic.
Lorena Cuéllar Cisneros replica esta visión, llevando bienestar a cada rincón,
garantizando acceso a servicios básicos y defendiendo la dignidad de los
pueblos. Bajo su liderazgo, se han fortalecido los programas de salud, educación
y atención a los sectores más vulnerables, demostrando que cuando el gobierno
escucha al pueblo, las soluciones son verdaderas y efectivas.
La Cuarta Transformación
enseña que el desarrollo económico no se mide solo en crecimiento, sino en
vidas mejoradas, en niñas y niños que sueñan, en jóvenes que estudian, en
familias que viven con dignidad. Cada avance en infraestructura, cada escuela
nueva, cada centro de salud rehabilitado, es un paso más hacia la justicia
social que tanto anhelamos.
Este nuevo modelo de
desarrollo también impulsa la equidad de género, el respeto a los pueblos
originarios y el reconocimiento de la diversidad como riqueza nacional. No
puede haber bienestar si no existe igualdad de oportunidades, si no se
erradican la discriminación y la exclusión.
Con el liderazgo de
nuestra Presidenta y el compromiso de nuestra Gobernadora, Tlaxcala es y
seguirá siendo parte viva de esta nueva etapa de justicia y esperanza. Cada
acción de gobierno, cada programa social, cada iniciativa de bienestar son
testimonio del profundo amor a México que inspira esta transformación.
Porque el futuro no se
espera: el futuro se construye. Y hoy, lo construimos desde el corazón del
pueblo, con trabajo, con esperanza y con la firme convicción de que un México
más justo y humano es posible.
La Cuarta Transformación
avanza, y Tlaxcala avanza con ella, de la mano de su gente, con la mirada
puesta en un porvenir de bienestar para todas y todos.
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