La escalada de violencia en el Medio Oriente es importante y preocupante, pero sin indicios –todavía – de que pueda derivar en la 3ra Guerra Mundial, aunque sí demostró, una vez más, la incapacidad de la ONU como presunto organismo mediador entre naciones, asentó Luis Ochoa Bilbao, internacionalista y director de la facultad de Ciencias Políticas de la BUAP.

Entrevistado acerca de la guerra Israel VS Irán y el ataque de Estados Unidos contra los iranís, Ochoa Bilbao descartó una alianza Rusia-China, para frenar a Estados Unidos e Israel o que los países árabes se unan alrededor del país musulmán frente a occidente. Por el contrario, adelantó que los americanos, israelitas y europeos podrían consolidar su dominio en esa zona del mundo, algo que han buscado desde 1918.    

¿El ataque de EEUU a Irán podría derivar en la 3ra Guerra Mundial?

La escalada de violencia es importante y preocupante, pero no hay indicios que más países pudieran involucrarse en una guerra. En realidad, lo que vimos fueron operaciones aéreas quirúrgicas de EEUU contra Irán. No estamos hablando de una guerra que incluya tropas terrestres o algún tipo de invasión.

Además, Irán se ha visto debilitado en los dos últimos años desde que Israel comenzó su guerra en Gaza, porque sus aliados, Hamás y Hezbolá fueron desmantelados, así como su cúpula militar y científica en los últimos días. En otras palabras, Irán podría tomar represalias, pero no cuenta con la capacidad de generar un conflicto de gran magnitud.

¿Cuál podría ser la reacción de China y Rusia?

Hasta ahora, es una reacción solo de condena por los bombardeos. No parece que vayan a involucrarse más allá de las declaraciones. Rusia ha perdido su presencia en el Medio Oriente tras la caída del régimen de Bashar al-Ásad en Siria. Están fuera de ese tablero geopolítico.

 Tampoco China ni Rusia han tratado de ponerle un alto a Israel ante su incursión en la Franja de Gaza. Y China nunca ha estado tan presente en el Medio Oriente como británicos y estadounidenses. Quizá China presione a Irán para que no detenga el flujo de petróleo que cruza por el estrecho de Ormuz. Pero veremos reacciones de condena y nada más, algo muy parecido a lo poco que pudo hacer la comunidad internacional tras la invasión de Rusia a Ucrania.  

¿Cómo ha sido la actuación de la ONU en toda esta crisis?

Ha sido totalmente marginal. La guerra entre Rusia y Ucrania, el conflicto en Gaza y ahora entre Israel, EEUU e Irán han demostrado que la ONU no tiene la capacidad de mediar de manera efectiva en esta clase de conflictos. La ONU está demostrando a 80 años de su creación que es ya una institución multilateral obsoleta.

Pienso que este siglo podría ser el siglo que vea desaparecer a la ONU, sin saber qué tipo de organismo o alianza multilateral pudiera sustituirla.

Desde el punto de vista militar ¿una alianza rusa, china y árabe podrían hacer frente a otra americana, inglesa, israelí y europea?

No hay indicios de que Rusia y China formen un frente conjunto para apoyar a Irán. Incluso a esas dos naciones, que son potencias nucleares, tampoco les conviene que Irán tenga armas nucleares. Y una alianza árabe es impensable. Arabia Saudita y Egipto comparten intereses muy cercanos con EEUU. Turquía tiene dentro de su territorio bases americanas y misiles apuntando hacia Rusia.

Ni Arabia Saudita ni Turquía formarían un frente con Irán, porque tampoco desean que ese país sea la potencia regional. Irán está sola como nación y, por eso, Israel y EEUU han visto la coyuntura como el momento ideal para debilitar al país.

Incluso apuestan por un cambio de régimen, es decir, que dejen de gobernar los ayatolas, la élite religiosa islámica que desde los años 70 del siglo pasado se apoderó del país.

Creo que estamos viendo la consolidación del poderío occidental en Medio Oriente. EEUU y Europa controlarán la región junto con Israel, algo que han tratado de hacer desde 1918, cuando la caída del imperio otomano dejó la zona a merced de las potencias occidentales.

Irak y Siria ya no juegan un papel importante y ahora es el turno de Irán. Esta es la gran estrategia occidental en medio oriente.

 ¿Cuál sería el papel de México en esta crisis?

México está totalmente al margen de la crisis. Actuará de acuerdo a sus principios de política exterior, pedirá que se respete el derecho internacional y pugnará por una solución pacífica.

Solo serán declaraciones, porque en el ámbito del poder global militar, nuestro país no pinta nada.